Los tres amores; eros, philia y ágape: definición, significado y diferencia
El pasaje en la escritura en el Evangelio de Juan 21:15-16 nos enseña la verdadera naturaleza del amor: hay diferentes maneras de amar:
"Jesús dijo a Simón Pedro: Simón, hijo de Jonás, ¿Me ágape mas que a éstos? Le respondió: Si, Señor, tú sabes que te Philia".
El idioma griego en tiempos de Jesús no tenia una palabra específica para el genero "Amor", cada forma del amor era designada por su propio nombre: eros, philia, agape.
Jesús pregunta con ágape, Pedro responde con philia. Agape es el amor projectado a toda la obra de Dios, a toda la creación de Dios. Agape es una perfección, un regalo de Dios. En cambio Philia es el amor del alma, el amor que surje del placer de vernos reflejados en el otro, es el amor natural del hombre. Hay una diferencia entre alma y espíritu. Eros, en cambio, es el amor de los amantes.
El alma nos relata Aristóteles en su libro "Acerca del alma", posee facultades propias como la locomoción, la nutrición, la reproducción.
El alma la define como el primer motor móvil, la perfección del cuerpo. Observemos que de esta definición surge que el alma es un Don espiritual, un regalo de Dios.
El alma nos relata Aristóteles es el origen de la virtud, ya que el fin de la virtud es la felicidad y ese es el deseo del alma. ¿Por que? Por que la felicidad es el equilibrio o armonía de las facultades del alma. Decimos entonces que la vida virtuosa es la vida del alma y su forma del amor philia, en contraste con la vida Bienaventurada que es la vida del espíritu.
Jesus pregunta con ágape porque ágape es la forma del amor propia de los "llenos del espíritu", de los "llenos de sabiduría", luego de la respuesta de Pedro, Jesús les promete el "espíritu santo" en Pentecostés (Juan 14:15). Agape es el amor adulto, en el alcanzamos la conformidad a Dios, Agape implica la vida eterna y con ella un auxilio especial de la gracia para afrontar situaciones dificiles.
En filosofia el paso de Philia a Agape se denomina Gnosis, en la fe cristiana "recibir al espiritu santo". Este paso esta representado en el sacramento de la confirmación.