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La importancia de la distinción entre el bien y el mal según la biblia

La importancia de la distinción entre el bien y el mal según la biblia La importancia de la distinción entre el bien y el mal según la biblia

Guarda tu lengua
del mal, y tus labios
de palabras mentirosas.
Apártate del mal y
practica el bien,
busca la paz y sigue
tras ella.
Salmo 34:14

El salmo 34 es un salmo de acción de gracias, el autor del salmo  alaba a Dios reconociendo su grandeza y su sabiduría para continuar luego con una exhortación  a los hijos de Dios para vivir la  vida recta, la misericordia y el temor de Dios y que solo con estos dones podemos alcanzar la vida eterna y la verdadera felicidad. El salmo finaliza con una retribución para buenos y malvados.
La Biblia nos recuerda: "La paga del pecado es muerte, mas la dadiva de Dios es vida eterna" Romanos 6:23, el final del salmo se asemeja a esta enseñanza del evangelio.
El salmo nos habla de una elección entre el bien y el mal, entre el pecado y la rectitud. El pecado es obrar el mal, es privar de ayuda al prójimo. El bien en cambio es actuar conforme a la ley divina: "haz por los demás lo que te gustaría que hicieran por ti" Mateo 7:12
La biblia nos enseña la importancia de la distinción entre el bien y el mal. El bien y el mal son estilos de vida, son estructuras básicas del pensamiento. Una vida llena de pecados o una vida de rectitud, tenemos que elegir. La virtud y los valores no explican el comportamiento humano. La actitud hacia nuestro prójimo determina nuestro estilo de vida.
Servimos a Dios o al dinero. Quienes pecan aman el dinero y sus vicios, actuando siempre en pos de una codicia desmedida. El miedo y la codicia son las emociones básicas en quienes hacen del pecado su estilo de vida.
En cambio quienes dirigen su pensamiento hacia lo Divino buscan mejorarse a si mismos, su entorno y la sociedad en la que viven. La vida buena, bella, sensata y feliz como nos dice Aristóteles es lo propio de las personas rectas.
La Ley del retorno actúa sobre nuestras elecciones, sobre nuestro estilo de vida es por esto que hablamos de frutos. El fruto de una vida llena de pecados es la ruina, una vida alejada de todo lo sensato y lo divino es por esto que se habla de "muerte".
En cambio para aquellos que eligen una vida de rectitud el retorno es la salud emocional, la felicidad de corazón y una vida longeva.

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